TALLER DE LECTURA Y ESCRITURA

Este blogfolio nació en 2008 para convocar la palabra escrita de las y los alumnos del TALLER DE LECTURA Y ESCRITURA de primer año del Profesorado en Lengua y Literatura de la Universidad Nacional de Villa María, provincia de Córdoba, Argentina.

Trabajamos intensamente en clases presenciales articuladas con un aula virtual que denominamos, siguiendo a Galeano, Mar de fueguitos.

Allí nos encontramos a lo largo del año para compartir los procesos de lectura y de escritura de ficción. Como en toda cocina, hay rumores, aromas, sabores, texturas diferentes, gente que va y viene, prueba, decanta, da a probar a otro, pregunta, sazona, adoba, se deleita. Al final, se sirve la mesa.

Como cada año, publicamos los cuentos que cada estudiante escribió como actividad de cierre del taller para compartir con quien quiera leernos y darnos su parecer. Hemos trabajado explorando el género narrativo, buceando en las múltiples dimensiones de la palabra. Para ello, la literatura será siempre ese espacio abierto que invita a ser transitado.

Hemos ido incorporando, además y entre otras muchas experiencias de escritura creativa, el concepto de intervención performativa sobre textos y de patchwriting.

El equipo de cátedra está conformado por Jesica Mariotta, Natalia Mana y Mauro Guzmán, quienes le ponen intensidad amorosa al trabajo del día a día, construyendo un hermoso vínculo con las y los estudiantes.

Beatriz Vottero - coordinadora


Alejandra Perachia

Aquel 17 de julio

17 de julio he salido caminando, la mañana está muy fría y gris, estoy a dos cuadras de la estación, la gente camina con prisa, sin levantar la vista, mi paso es tranquilo. Ellos no notan mi dolor, mi tristeza no se va, con el paso del tiempo parece aumentarse.
Me encuentro esperando el tren, en mi cabeza aquello me da vueltas. No puedo borrarte de mi pensamiento, quisiera volver el tiempo atrás o estar contigo en algún lugar donde sea que estés.
Al acostarme anoche y como todas las noches te pensé y te volví a soñar en la misma playa de siempre, bajo aquel hermoso atardecer con el sonido de las olas de fondo. Al cerrar mis ojos lo escucho todavía, siento la brisa del viento en mi rostro y el susurro de tu voz -que no puedo borrar- permanece intacto desde aquella última vez. Tengo grabado en mi recuerdo, además, que no íbamos caminando de la mano: me llevabas en tus brazos.
Llego a la oficina, no logro concentrarme, das vueltas dentro de mí como la sangre hace su recorrido. Mis días no son los mismos, son grises, oscuros;  jamás sentí algo tan profundo… un dolor tan profundo.
Muchas horas de trabajo, jornada agotadora. Otra vez en la estación voy de regreso a casa, a reencontrarme con mi soledad. La noche va cayendo, el sol se va escondiendo, el reflejo de un rayo atraviesa el vidrio, me hace cerrar los ojos, me dormito en la butaca. No puedo despertar ¡no logro abrir mis ojos!, siento gritos, llantos, ¡no puedo ver! Se siente mucho ruido, a lo lejos las sirenas, no entiendo qué es lo que pasa. Me levantan, me llevan, mi corazón late muy fuerte, ¡no siento mis brazos, mis piernas! Todo se vuelve silencio.

Comienza mi recorrido por un camino donde a lo lejos me parece ver tu sombra, me voy acercando y me extiendes tu mano, corro a abrazarte, vuelvo a sentir tu perfume, tu piel suave y tibia como la última vez que estuvimos juntos y por razones del destino debimos separarnos .Me susurras al oído que nunca más nos separaremos, me cargas en tus brazos y caminas por la playa...

1 comentario:

profe Beatriz dijo...

Muy bien elegida la narración en primera persona, Alejandra, que va soltando sus pensamientos, sus recuerdos, su desesperanza, su soledad, en un acontecer donde se superponen los planos temporales y espaciales, como sucede cuando nos enajenamos del contexto "real" y nos "trasladamos" hacia el pasado, trayéndolo a la memoria entre la imaginación y las sensaciones vividas, como si las experimentáramos de nuevo.
Que esta escritura sea una de tantas que vendrán, preparándote para la profesión que has elegido.